Una hernia de hiato se produce cuando la parte superior del estómago sobresale a través del músculo grande que separa el abdomen y el pecho, conocido como diafragma. Este músculo tiene una pequeña abertura denominada hiato, a través de la cual el esófago (el conducto que transporta los alimentos) pasa antes de conectarse con el estómago. En el caso de una hernia de hiato, el estómago sube a través de esta abertura hacia el interior del pecho.
Las hernias de hiato pequeñas generalmente no causan problemas significativos y muchas personas no saben que las tienen. Estas hernias suelen ser descubiertas incidentalmente durante exámenes médicos realizados por otras afecciones.
Las hernias de hiato más grandes pueden provocar que los alimentos y los ácidos del estómago refluyan hacia el esófago, causando acidez estomacal y otros síntomas asociados con el reflujo gastroesofágico (ERGE). Los síntomas pueden incluir:
-Acidez o ardor en el pecho
-Regurgitación de alimentos o líquidos
-Dificultad para tragar
-Dolor en el pecho o el abdomen
-Sensación de saciedad después de comer pequeñas cantidades de comida
Diagnóstico
El diagnóstico de una hernia de hiato puede realizarse a través de varios métodos, entre ellos:
-Radiografía con bario: donde se ingiere un líquido de contraste que permite visualizar el esófago y el estómago en las imágenes radiográficas.
-Endoscopia: un procedimiento en el que se introduce una cámara a través del esófago para observar el interior del estómago y detectar anomalías.
-Manometría esofágica: mide la presión y el movimiento dentro del esófago.
Tratamiento
El tratamiento depende del tamaño de la hernia y de la gravedad de los síntomas. Las opciones incluyen:
-Medidas de autocuidado: como evitar comidas abundantes, no acostarse inmediatamente después de comer, perder peso y elevar la cabecera de la cama.
-Medicamentos: los antiácidos, bloqueadores de los receptores H2 y los inhibidores de la bomba de protones pueden ayudar a reducir la producción de ácido y aliviar los síntomas de la acidez.
-Cirugía: en casos severos, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para reducir la hernia y fortalecer el hiato diafragmático.
Para manejar y prevenir los síntomas de una hernia de hiato, es recomendable seguir una dieta saludable, evitar el consumo de alimentos y bebidas que desencadenan acidez, como el café, el alcohol, el chocolate y los alimentos picantes. Mantener un peso saludable y realizar ejercicio regularmente también puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar una hernia de hiato.
La hernia de hiato es una condición común que varía en gravedad. Si bien las hernias pequeñas pueden no presentar síntomas y no requieren tratamiento, las más grandes pueden causar incomodidad y problemas digestivos que requieren atención médica. Si experimentas síntomas de acidez persistente, es importante consultar a un profesional de la salud para un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento eficaz. Cuidar de tu salud digestiva puede mejorar significativamente tu calidad de vida.