El FibroScan es un dispositivo exclusivo que lleva al tratamiento no invasivo de la enfermedad hepática a un nivel superior.
La enfermedad hepática crónica representa una importante y creciente preocupación para el sector del cuidado de la salud pública que afecta a más de mil millones de personas en todo el mundo.
Puede ser causada por un virus, como la hepatitis B o C, por excesivo consumo de alcohol o por los hábitos alimenticios, lo que provoca afecciones como la enfermedad del hígado graso no alcohólico (Non-Alcoholic Fatty Liver Disease, NAFLD) y la esteatohepatitis no alcohólica (Non-Alcoholic Steatohepatitis, NASH).
Estas enfermedades por lo general no tienen síntomas ni se detectan hasta que no están en sus últimas etapas, pero empeoran progresivamente con el correr del tiempo y, finalmente, pueden provocar complicaciones mortales como cirrosis hepática o cáncer de hígado.
FibroScan es una solución precisa y eficiente que cuantifica la fibrosis hepática y la esteatosis de manera no invasiva en tan solo unos pocos minutos, y aporta una seguridad clínica extra en el tratamiento de pacientes con enfermedades hepáticas crónicas, lo que evita las dolorosas biopsias de hígado.
FibroScan utiliza tecnología patentada de Elastografía de Transición a Vibración Controlada (Vibration-Controlled Transient Elastography, VCTE), que usa una combinación de ondas transversales y ultrasonido generados en la punta de la sonda del dispositivo.
El nuevo FibroScan insignia mejora la eficiencia del examen, amplía la aplicabilidad del paciente y aumenta las capacidades clínicas.
El FibroScan 630 Expert tiene un motor de elastografía de alto rendimiento, mejoras en cuanto a ergonometría, un sistema incorporado de ultrasonido dirigido, un examen específico para el bazo, interfase intuitiva para el usuario, pantalla táctil y teclado avanzado, además de lector de código de barras incorporado.
