FibroScan se recomienda para pacientes con diagnóstico y tratamiento de la enfermedad hepática y su tecnología de control hepático no es invasivo.
El FibroScan permite a los médicos identificar a las personas en riesgo de sufrir resultados hepáticos adversos y conectarlos con opciones de tratamiento y atención preventiva.
La nueva autorización elimina las contraindicaciones para el embarazo y los implantes activos e incluye lo siguiente:
FibroScan puede ayudar al médico a determinar la probabilidad de cirrosis y evaluar la fibrosis hepática y la esteatosis hepática.
Designa a FibroScan como una ayuda no invasiva para el manejo clínico, diagnóstico y seguimiento de pacientes adultos y pediátricos con enfermedad hepática confirmada o sospechada como parte de una evaluación general del hígado.
La población de pacientes se ha ampliado de «pacientes con enfermedad hepática» a «pacientes con enfermedad hepática confirmada o sospechada».
Se ha eliminado la edad como primera sonda de selección y paso tipo examen.
La interpretación de las mediciones se ha ampliado a todos los médicos con la formación adecuada.
La eliminación de «estimaciones de» cuando se hace referencia a la rigidez del tejido.
«Estas indicaciones de uso actualizadas son otro punto de prueba para que las pruebas de detección con FibroScan se conviertan en algo común en la vía de la atención clínica».
Ampliar el uso del equipo FibroScan a una población de pacientes más grande permite a los médicos diagnosticar y manejar la sospecha de enfermedad hepática en etapas más tempranas y brindar una mejor calidad de atención.
El dispositivo FibroScan se puede usar para predecir el riesgo de progresión y descompensación de la enfermedad, guiar las decisiones de manejo, evaluar la respuesta al tratamiento y reducir significativamente la necesidad de una biopsia.