La enfermedad hepática es un problema de salud que engloba múltiples condiciones que afectan el funcionamiento adecuado del hígado, uno de los órganos vitales más importantes para el organismo. Factores como el consumo de alcohol, infecciones virales, desórdenes metabólicos y predisposición genética pueden derivar en enfermedades hepáticas graves y, en algunos casos, irreversibles.
Los síntomas de la enfermedad hepática suelen incluir dolor abdominal, inflamación, ictericia (color amarillento en la piel y los ojos) y resultados anormales en las pruebas de función hepática. Sin embargo, la presencia de estos síntomas puede variar y, en ocasiones, las enfermedades hepáticas avanzan sin mostrar señales evidentes hasta etapas críticas.
Los factores de riesgo para desarrollar enfermedades hepáticas incluyen la obesidad, el consumo excesivo de alcohol, antecedentes familiares de enfermedad hepática, exposición a ciertos virus y toxinas, así como algunos medicamentos que pueden inducir colestasis, una acumulación de bilis en el hígado. La prevención, por lo tanto, implica un estilo de vida saludable, una dieta balanceada, la moderación del consumo de alcohol y la vacunación contra la hepatitis A y B.
Elaine Cordones Figaris, quien se desempeña como directora del capítulo de Hígado de la Sociedad Dominicana de Gastroenterología, resalta que “la creciente prevalencia de enfermedades hepáticas como la MASLD y el carcinoma hepatocelular exige un enfoque integral que combine diagnóstico temprano, educación sobre los factores de riesgo y promoción de estilos de vida saludables.” La Dra. Cordones también destaca la importancia de incluir herramientas avanzadas en los diagnósticos, como el Fibroscan o elastografía hepática, para evaluar el estado del hígado de manera precisa y no invasiva.
Los especialistas en salud recomiendan a las personas con factores de riesgo someterse a chequeos médicos regulares y estar atentos a cualquier síntoma inusual, ya que el diagnóstico temprano es fundamental para detener la progresión de estas enfermedades y mejorar la calidad de vida de los pacientes.