Un marcapasos es un pequeño dispositivo que se coloca debajo de la piel del pecho para ayudar a controlar los latidos del corazón, cuando está latiendo irregularmente o en forma muy lenta.
La implantación de un marcapasos en el pecho requiere un procedimiento quirúrgico.
El procedimiento se realiza en aproximadamente 1 hora en la mayoría de los casos. Al paciente sedara para ayudarlo a relajarse. Pero estará despierto durante el procedimiento.
Se hace un pequeño corte, que por lo regular se realiza en el lado izquierdo (si paciente es diestro) del pecho debajo de la clavícula. El generador del marcapasos se coloca luego bajo la piel en esta localización. También puede colocarse en el abdomen, pero esto es menos común.
Usando imágenes de rayos X en vivo para ver la zona, el médico coloca las derivaciones a través del corte, dentro de una vena y luego hasta el corazón. Las derivaciones se conectan al generador. La piel se cierra con suturas. La mayoría de las personas se va a casa al cabo de 1 día después del procedimiento.
Un marcapasos está compuesto por un generador de impulsos y uno o dos cables conductores.
El marcapasos se programa a una frecuencia determinada según las necesidades del paciente, comúnmente a 60 latidos por minuto. A través de sus circuitos eléctricos y los catéteres “monitorea” permanentemente el ritmo cardíaco espontáneo del paciente y cuando éste desciende por debajo de la frecuencia programada, emite un estímulo eléctrico que provoca un latido cardíaco evitando de esta manera, que la frecuencia cardiaca caiga.