Las enfermedades cardiovasculares (ECV) siguen siendo la principal causa de muerte a nivel mundial, cobrando la vida de aproximadamente 17,9 millones de personas al año, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Estas enfermedades incluyen trastornos del corazón y los vasos sanguíneos, como la hipertensión, la cardiopatía coronaria, el infarto de miocardio, y el accidente cerebrovascular (ACV), entre otros.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo más comunes asociados a las ECV son el tabaquismo, la mala alimentación, la falta de actividad física y el consumo excesivo de alcohol. Estos hábitos pueden llevar al desarrollo de hipertensión arterial, colesterol elevado, obesidad y diabetes, condiciones que aumentan significativamente el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.
Prevención
Una de las mejores formas de prevenir las ECV es adoptar un estilo de vida saludable. Esto incluye llevar una dieta balanceada rica en frutas, verduras, granos integrales, y reducir el consumo de alimentos ultraprocesados. Además, es crucial realizar al menos 150 minutos de ejercicio moderado por semana y evitar el tabaquismo. El control regular de los niveles de presión arterial y colesterol también es fundamental para reducir riesgos.
La situación en República Dominicana
En República Dominicana, las enfermedades cardiovasculares son una de las principales causas de mortalidad. El país enfrenta un aumento en la prevalencia de la hipertensión y diabetes, lo que ha generado preocupación en el sector salud. Por esta razón, los expertos recomiendan fortalecer los programas de prevención y promover campañas educativas que concienticen a la población sobre la importancia de la detección temprana y el manejo de factores de riesgo.
Importancia del diagnóstico temprano
El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado son esenciales para prevenir complicaciones graves o incluso la muerte. Pruebas como electrocardiogramas, ecocardiogramas y pruebas de esfuerzo son útiles para detectar problemas cardíacos antes de que se conviertan en un peligro inminente. Las visitas regulares al médico y la adherencia a los tratamientos recomendados también juegan un papel importante.
Las enfermedades cardiovasculares representan un gran desafío para la salud pública tanto a nivel global como en República Dominicana. La educación, la prevención y el acceso a servicios de salud de calidad son claves para combatir esta epidemia silenciosa que afecta a millones de personas en todo el mundo.
