Otro modelo muy distinto de prótesis valvulares cardíacas son las válvulas biológicas, la mayoría son hechas de válvula aórtica porcina.
La ventaja de las válvulas biológicas es que reducen el riesgo de formar coágulos a partir de la válvula que ocasionan embolias y falla en el funcionamiento de la válvula.
La desventaja principal de las válvulas biológicas o de tejidos es que tienen una duración limitada y deben ser sustituidas después de un tiempo.
El tiempo promedio hacer el cambio de una válvulas biológicas depende de la edad del paciente, por ejemplo si se trata de un niño joven, tendrá que reemplazarse en un par de años, mientras que en una persona de edad media tendrá que cambiarse en 10 años aproximadamente, y duran más tiempo en pacientes de 70 o más años. El consenso general es que las válvulas de tejidos no necesitan ser sustituidas si se colocan en personas mayores de 70 años.
Este tipo de válvulas pueden llegar a durar entre 10 y 20 años. Pero en los pacientes jóvenes pueden deteriorarse rápidamente.