La fibrilación auricular es la frecuencia cardíaca acelerada e irregular que puede aumentar el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular, insuficiencia cardíaca y otras complicaciones relacionadas con el corazón.
La fibrilación auricular es la arritmia cardiaca más frecuente en la práctica clínica. Esta enfermedad se caracteriza por latidos auriculares descoordinados y desorganizados, produciendo un ritmo cardíaco rápido e irregular.
Durante la fibrilación auricular, las dos cavidades superiores del corazón laten de forma irregular, sin coordinar con las dos cavidades inferiores del corazón.
La fibrilación auricular es una de las principales causas de morbimortalidad, y aumenta el riesgo de muerte, insuficiencia cardiaca congestiva y fenómenos embólicos, incluido el accidente cerebrovascular.
La calidad de vida se ve considerablemente deteriorada en los pacientes con fibrilación auricular, debido a su incapacidad para realizar las actividades diarias normales y al riesgo de exacerbación de los síntomas.
Los síntomas de fibrilación auricular son por lo general palpitaciones, dificultad para respirar y debilidad.
La fibrilación auricular es una enfermedad grave que no suele requerir tratamiento de urgencia. Pero una preocupación importante es la posibilidad de desarrollar coágulos sanguíneos dentro de las cavidades superiores del corazón. Estos coágulos sanguíneos que se forman en el corazón pueden circular a otros órganos y bloquear el flujo sanguíneo.